Cálculo y Selección de Depósito de Expansión

Cálculo del depósito de expansión

El cálculo del depósito de expansión se realiza para determinar su volumen, el diámetro mínimo del tubo de conexión, la presión inicial del espacio de gas y la presión de operación inicial en el sistema de calefacción.

La metodología para el cálculo de los depósitos de expansión es compleja y rutinaria, pero en general se puede establecer la siguiente relación entre el volumen del depósito y los parámetros que influyen en él:

• Cuanto mayor sea la capacidad del sistema de calefacción, mayor será el volumen del depósito de expansión.
• Cuanto mayor sea la temperatura máxima del agua en el sistema de calefacción, mayor será el volumen del depósito.
• Cuanto mayor sea la presión máxima permitida en el sistema de calefacción, menor será el volumen del depósito.
• Cuanto menor sea la altura desde el lugar de instalación del depósito de expansión hasta el punto más alto del sistema de calefacción, menor será el volumen del depósito.

Dado que los depósitos de expansión en el sistema de calefacción no solo son necesarios para compensar el volumen de agua que cambia, sino también para reponer pequeñas fugas del fluido térmico — en el depósito de expansión se prevé una reserva de agua, el llamado volumen operativo. El algoritmo de cálculo anterior incluye un volumen operativo de agua del 3% de la capacidad del sistema de calefacción.

Selección de depósitos de expansión

La selección del depósito de expansión debe realizarse teniendo en cuenta sus características de temperatura y resistencia. La presión y la temperatura en el punto de conexión del depósito no deben exceder los valores máximos permitidos.

El volumen del depósito de expansión debe ser igual o mayor que el volumen obtenido del cálculo. No hay consecuencias negativas por sobreestimar el volumen más allá del cálculo.

Si se prevé la instalación de depósitos de expansión en una sala, se debe tener en cuenta que los depósitos con un diámetro superior a 750 mm y una altura superior a 1,5 m pueden no pasar por las puertas, y para su transporte se necesitarán medios de mecanización. En este caso, es mejor preferir varios depósitos de membrana más pequeños en lugar de uno grande.

¡Atención!

1. Al utilizar mezclas de glicol como fluido térmico, se recomienda seleccionar un depósito de expansión cuyo volumen sea un 50% mayor que el calculado.

2. El primer signo de un depósito de expansión mal calculado o sin ajuste es cuando la válvula de seguridad se activa con frecuencia.

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