Diseño de un contador de calor

El medidor de calor unitario es un dispositivo único en el que la calculadora no se separa del sensor de flujo y de los sensores de temperatura. La configuración completa y la verificación inicial de los medidores de calor unitarios se realizan en la fábrica del fabricante; estos dispositivos de medición no pueden ser modificados posteriormente.

El medidor de calor modular se compone de módulos separados (calculadora, sensor de flujo, sensor de temperatura). Los medidores de calor modulares tienen una configuración flexible y pueden ensamblarse según las necesidades específicas, como la capacidad de la calculadora para archivar datos, el rango de flujo y la longitud de los cables de conexión.

La calculadora con alimentación autónoma — está equipada con una fuente de alimentación incorporada. Las ventajas de esta calculadora son principalmente la simplicidad de instalación. Los inconvenientes incluyen la corta longitud de los cables de conexión, que generalmente no supera los 15 metros, y la vida útil limitada de la fuente de alimentación, que va de 6 a 12 años, menor que la vida útil estimada de los medidores de calor.

La calculadora con alimentación externa — se conecta a una fuente de alimentación externa de 230V o 24V. Estas calculadoras pueden instalarse hasta 100 metros de distancia de los sensores de flujo y temperatura, cuentan con memoria no volátil y, en caso de una interrupción de la alimentación, detienen el almacenamiento de datos, manteniendo el tiempo de inactividad registrado.

El medidor de calor con sensor de flujo mecánico (medidor de calor mecánico) se caracteriza por su bajo costo, sensibilidad a la calidad del fluido térmico y una resistencia hidráulica relativamente alta. En la parte de flujo de los medidores de calor mecánicos, se instala un rotor con aspas, cuyo giro se transmite al mecanismo de conteo. El principio de medición del flujo es taquimétrico.

Es obligatorio instalar un filtro de malla antes del medidor de calor mecánico.

El medidor de calor con sensor de flujo ultrasónico destaca por su alta fiabilidad y precisión, además de ser insensible a la calidad del agua y generar una resistencia hidráulica mínima.

El principio de funcionamiento del sensor de flujo ultrasónico se basa en la dependencia de la velocidad de propagación del ultrasonido en corrientes de fluido inmóviles y en movimiento. Dos sensores, ubicados en la parte de flujo del cuerpo, intercambian señales ultrasónicas, y el tiempo de transmisión de la señal del emisor al receptor se utiliza para calcular la velocidad del flujo y, por lo tanto, el caudal.

El medidor de calor con sensor de flujo electromagnético tiene una resistencia hidráulica mínima y no tiene partes móviles o salientes en la parte de flujo. Los sensores de flujo electromagnéticos son insensibles a las impurezas en el fluido térmico que no afectan la conductividad térmica del líquido. Los medidores de calor con sensores de flujo electromagnéticos requieren una instalación muy calificada.

El medidor de calor con sensor de flujo de resonancia no tiene partes móviles en la parte de flujo y tiene la capacidad de autolimpieza de pequeñas impurezas.

Junto con los medidores de calor, se utilizan sensores de temperatura de platino de tres tipos: Pt100, Pt500 y Pt1000. Un sensor de platino es una resistencia cuyo valor varía en función de la temperatura según una ley conocida. Las letras Pt indican que el elemento sensible del sensor está hecho de platino, y los números 100, 500 y 1000 corresponden a la resistencia en ohmios a una temperatura de 0°C.

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